
Sus mejores pensamientos dice que le llegan siempre que está en la horizontal. O sea, tumbado en la cama.
Jubilado de algunas pasiones por enfermedad, desarrolla un sentido del humor ácido. A sus setenta y tantos años está enganchado al sintrón por tener un corazón que ha querido tanto, según dice.
Ayer en la sobremesa, tomando café, me interesé por su salud.
Y con esa sorna que sólo él tiene contestó:
“No te tienes que preocupar porque anoche soñé con San Pedro y me comunicó que aún voy a tardar en visitarle. Hasta que todos mis hijos tengan trabajo”.
Solté una carcajada y él rápidamente añadió: “…Y todos mis nietos”.
(El gran soñador disfruta de cinco hijos y cinco nietos .Sólo tres miembros de su familia tienen empleo)
Jubilado de algunas pasiones por enfermedad, desarrolla un sentido del humor ácido. A sus setenta y tantos años está enganchado al sintrón por tener un corazón que ha querido tanto, según dice.
Ayer en la sobremesa, tomando café, me interesé por su salud.
Y con esa sorna que sólo él tiene contestó:
“No te tienes que preocupar porque anoche soñé con San Pedro y me comunicó que aún voy a tardar en visitarle. Hasta que todos mis hijos tengan trabajo”.
Solté una carcajada y él rápidamente añadió: “…Y todos mis nietos”.
(El gran soñador disfruta de cinco hijos y cinco nietos .Sólo tres miembros de su familia tienen empleo)
4 comentarios:
Así de perfil le encuentro cierto parecido...
No me cabe la menor duda.
La fotografía recoge el instante en que Errol Flynn contempla su hacienda justo antes de emprender viaje a México donde perdería toda su fortuna en una partida de tute.
Me suena la película.
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